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lunes, 28 de mayo de 2012

It´s nice to be nice


El post de hoy no es muy científico que digamos…pero bueno, da igual. O quizás sí sea científico: ¡de etología humana!

Pues resulta que he tenido un poco abandonado el blog porque entre otras cosas, me salió un trabajo basurilla bastante intenso, en el que empecé el lunes y he llegado hasta el sábado, tras lo cual he hecho cuentas y he decidido despedirme , porque creo que todavía me puedo permitir no trabajar por miserias como 2 €/hora o menos…
Seguramente este cobraba más de esclavo, que vendiendo lotería de la Cruz Roja



El trabajo en cuestión trata de vender lotería de la Cruz Roja y la “gracia” es que te pagan a comisión. Si vendes mucho te forras, pero si vendes por debajo de 50 cupones diarios, esa comisión es tirando a ridícula, y además, eso sí, tus 5 horitas pateándote la calle o el Corte Inglés te las tienes que hacer obligatoriamente, y eso nadie te lo paga. Evidentemente, resultó que yo no soy buena vendedora, por lo menos no de calle, ya que para eso hay que tener gracia y salero suficiente para que la gente se ría y se pare…con lo cual la cosa no resultaba rentable.

Pero a lo que iba: intentando vender cupones, he sonreído mucho y a veces sin ganas, y he dado los buenos días, las buenas tardes y las buenas noches profusamente. Y cuan grande (y agradable) fue mi sorpresa al descubrir varias cosas:

  1. Cuando le sonríes a alguien (un completo desconocido que pasa cerca de ti), en un 90% de los casos la otra persona te sonríe a ti. ¡Y eso es muy agradable!
  2. Cuando sonríes mucho y te esfuerzas en hablar de buen rollo a la gente aunque estés haciendo un papel teatral porque no te apetezca, al cabo del rato, realmente te empiezas a sentir de buen humor sin saber porqué. Va a ser que los ejercicios de algunos libros de auto-ayuda van a tener razón…
  3. De repente, estando en mitad de la calle Preciados, sonriendo a to quisqui (potenciales compradores de cupones) y con todo quisqui (que al final no me compraban) sonriéndome a mí, y de cachondeo con los de los carteles de “Compro Oro”, y con l@s chic@s de  las  ONGs intentando captar socios…pues como que he sentido que en el fondo la raza humana no es tan chunga, y que quizás sí sea cierto que somos más parecidos a los bonobos (amistosos con otras tribus) que a los chimpancés (territoriales y agresivos). ¿demasiado optimista? Puede...pero da gustito en medio de la que está cayendo, encontrar cosas agradables en la humanidad como masa (en este caso en "mi masa" humana de Sol/Preciados/ElCarmen/CorteInglés).


De ahí la frase del título, que viene de mi año de Erasmus en Glasgow, que la frasecita de marras estaba por la calle (ya no recuerdo si en carteles o pegatinas, como campaña del ayuntamiento, o dentro de alguna publicidad o porqué...): IT´S NICE TO BE NICE.

Y para colofón: he sido espectadora de primera de más manifestaciones (cuando veía que no vendía na de na, me iba a Sol a ver qué se cocía por allí): la gente cada día se supera más a si misma en decir las verdades de una forma ingeniosa:




jueves, 10 de mayo de 2012

¡Aproveche la crisis para dejar de fumar!


Esta bendita plantita, o más bien la falta de ella, me ha  traído un poco loca últimamente, así que se me antoja hablar un poco de ella…su origen está en la zona andina, entre Ecuador y Perú y numerosas civilizaciones precolombinas ya la utilizaban, no sólo para fumar, sino como aderezo de rituales varios, e incluso previo a las relaciones sexuales. Fue en 1492, tras el descubrimiento de América por Colón, que se trajo a Europa y se popularizó su uso. Uno de los primeros fumadores europeos fue Rodrigo de Jerez, compañero de Cristóbal Colón, pero tuvo la mala suerte de que a su vuelta a España la Inquisición le encarceló, puesto que interpretó que” echar humo por la boca sólo podía ser cosa de Satanás”.  Me resulta muy apropiada esta idea de los inquisidores, ya que el estado en que me encontraba en las múltiples ocasiones en que he intentado dejar de fumar (incluída la última en que por fin lo conseguí) sólo se podría definir como de “endemoniada”.

¿Porqué el tabaco es tan adictivo? Por un lado está la adicción psicológica que se suele considerar más leve. Sin embargo, se puede ser muy adicto a un simple gesto y resultar horriblemente difícil evitarlo…no hay más que fijarse en los adictos a comerse las uñas. Además, está la adicción física, debida a la nicotina. 

 La nicotina es un alcaloide que  llega al cerebro en un tiempo tan corto como 10-60 segundos después de dar una calada. Allí, actúa sobre las áreas del sistema de recompensa del cerebro que como su propio nombre dice (recompensa), constituye la zona que se activa cuando hacemos cosas que resultan placenteras, y estimula a los receptores nicotínicos de acetilcolina. Es decir, actúa imitando la acción de la acetilcolina, un neurotrasmisor natural, que induce estimulación del estado mental, aumento de rendimiento cognitivo y sensación de recompensa. ¿Sabéis que otra droga actúa también potenciando los efectos de la acetilcolina? ¡La cocaína! Realmente la nicotina es una de las drogas más adictivas que existen, muchos expertos aseguran que su poder de adicción es similar al de la heroína.

A su vez, la nicotina hace que  se libere dopamina. Y la dopamina es otro neurotrasmisor que cuando se produce en grandes cantidades, se siente uno muy bien, bien dopado vamos. Por eso los desequilibrios en los niveles de dopamina están tan relacionados con las adicciones.

Dejar se puede dejar, pero nadie dijo que fuera fácil…realmente una persona que no haya sido adicta a nada, es incapaz de comprender lo que es el síndrome de abstinencia. Por poner un ejemplo: cuando eres adicto a algo, tu cuerpo lo necesita como si fuese comida. Así que lo mejor que se puede hacer es apoyar a la persona que está dejando de fumar, y valorar los esfuerzos que está realizando, ya que de cara a las sensaciones físicas, es equiparable a como si uno  intentara obligarse a sí mismo a dejar de comer. Por tanto, no es tan sencillo como reducirlo a un simple acto de voluntad. 

Ya para acabar, propongo un método nuevo, a la par que un poco retorcido,  para dejar de fumar. Pero bueno, en mi caso de fumadora compulsiva es el único que me ha funcionado hasta ahora. Generalmente, un fumador tiende a buscar un momento de su vida tranquilo, sin grandes preocupaciones, para dejar el tabaco. ¡Gran error! En mis varios intentos, siempre volvía a fumar porque me sentía tan sumamente miserable (por el síndrome de abstinencia) que no lo soportaba y quería volver a mi anterior estado feliz, antes de dejar de fumar. Sin embargo, ahora que estoy en paro, y digamos que un poco agobiadilla, ¡lo he conseguido! Lo que he hecho es usar mis preocupaciones y estreses como “excusa” para sentirme mal cuando estaba con el monazo. La conversación interna conmigo misma sería la siguiente:

-Qué mal me siento, quiero fumar.       

-A ver, tú no te sientes mal porque te falte el tabaco, te sientes mal porque no tienes trabajo ni hay señales de que lo vayas a conseguir a corto plazo, te sientes mal porque hay crisis económica, te sientes mal porque este país se va a pique y probablemente vas a tener que emigrar sin ninguna p*** gana…si fumas, nada de eso va a cambiar (no te vas a sentir mejor), así que ¿para qué fumar?
Yo con el mono de nicotina  (broma, es de la película "El Grito")
 Y es cierto que una vez se pasa el mono físico todo es más fácil. Son unos días de pesadilla mental, irritabilidad extrema, tristeza extrema, nerviosismo extremo y todas las cosas extremas que queráis… pero es poco tiempo (en mi caso fueron unos 10 días) y después se esfuma.

Luego hace mucha  ilusión cuando vas en la bici y ves que te subes seguido y a ritmo ágil una calle cuesta arriba, a la vez que vas conversando tranquilamente con el de al lado! (la situación anterior era: pérdida de respiración, amago de echar los pulmones por la boca, velocidad más lenta que la de un peatón, necesidad de alguna que otra parada…).

En resumen: ha valido la pena. Llevo dos meses. ¡Bien por mí! Y a quien quiera dejarlo le digo: si yo puedo, cualquiera puede. Pues eso...

miércoles, 2 de mayo de 2012

Una de OMGs (Organismos Modificados Geneticamente, no "Oh My Gosh")

Pues para empezar, algo que me ha llamado la atención hoy: un grupo de científicos del centro Rothamsted Research, en Reino Unido, lanzan una carta a activistas anti-OMGs (OMG=organismo modificado genéticamente) para que no les destrozen los cultivos, ante sus amenazas:


Me parece curioso y controvertido el tema de los OMGs, y pienso que como en todo, los OMGs no son buenos ni malos por el hecho de ser OMGs, depende  cada caso concreto, depende de su uso...

Para empezar, a mucha gente le parece que un OMG es algo antinatural, pero si lo pensamos, el ser humano lleva modificando las especies genéticamente desde que se inventó la agricultura, sólo que con las técnicas géneticas modernas, se hace más rápido. A todo esto, sé que muchos consideran que la tecnología humana es algo "artificial", pero sinceramente, yo pienso que los seres humanos somos unos animales más, por tanto ¿porqué algo que hacen unos animales se debe considerar antinatural? ¿Acaso cuando un pajaro construye un nido, se considera el nido "antinatural", porqué no aparecen nidos espontáneamente en la naturaleza a menos que alguien los haga? Creo que la tecnología se debe juzgar por sus efectos, no por dogmas (natural=bueno, tecnológico/procesado/hechoporelhombre=malo), que para dogmas ya tenemos por desgracia unas cuantas religiones...

http://www.guardian.co.uk/uk/2012/may/01/anti-gm-activists-wheat-rothamsted?newsfeed=true


Volviendo a los OMG: un ejemplo de OMG malo serían las semillas "terminator" creadas por Monsanto, que eran estériles, y por tanto obligaban a los agricultores a comprar semillas nuevas cada año (aunque por otro lado, que una semilla sea estéril tiene un punto positivo: no se va a producir en ningún caso contaminación genética en el medio ambiente, ya que no se puede esparcir por ahí). Otro OMG malo (este es de los super-malos en realidad): las plantas resistentes a glifosato. El glifosato es un herbicida muy tóxico! Por tanto, cultivar cosas resistentes a glifosato nos permite usar este indiscriminadamante para matar las malas hierbas (y de paso matar a todo bicho viviente que pase  por ahí). 

¿Y el OMG de la carta con la que empecé el post? Pues este podría ser bueno: es una variedad de trigo que repele a los áfidos (unos bichitos que pueden hacerse plaga), y los repele porque tiene un gen que produce una feromona que los ahuyenta. Una feromona es un compuesto natural , y la feromona que se le ha añadido a este trigo ((E)-β-farnesene), es una que la tienen de forma natural varias plantas comestibles, por ejemplo, la menta. Por otro lado, el laboratorio que está trabajando en esta planta es un laboratorio de investigación básica, el dinero de este proyecto de investigación viene de fondos públicos, y estas investigaciones no están destinadas a ser patentadas. Resumiendo: que no son ninguna gran empresa malvada estilo Monsanto. 



En este caso, yo les daría una oportunidad de acabar de hacer las evaluaciones de seguridad (que están en ello). Pienso que un OMG no tiene porque ser malo obligatoriamente, la principal duda que tengo al respecto es más bien ecológica: si una planta tiene un gen que la ayuda a sobrevivir mejor, lo más normal sería que acabara imponiéndose en la Naturaleza, y desplazando a otras variantes de la misma especie y reduciendo así la biodiversidad. Aunque vaya, resulta que eso ya ha ocurrido en varias ocasiones por culpa del hombre sin necesidad de OMG! Por ejemplo, en los 80 se usó la mariquita de siete puntos en Estados Unidos para luchar contra las plagas de pulgones, y está acabó desplazando y sustituyendo a la mariquita autóctona. Así que habrá que ir despacito y con buena letra, que meter especies nuevas en un hábitat , independientemente de si son OMGs o no, puede tener consecuencias.
 

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